El 90% de las muertes súbitas se dan debido a enfermedades cardíacas
Se conoce comúnmente como muerte súbita, al episodio donde se para de forma repentina el corazón en una persona aparentemente saludable.
A pesar de que, en Colombia, no existe actualmente una estadística que permita reconocer el número exacto de muertes asociadas a esta causa, se ha vuelto recurrente escuchar situaciones de muerte súbita en personas que realizaban algún tipo de deporte o actividad física.
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De acuerdo con un estudio publicado por el Canadian Journal of Cardiology, se estima que al año se registran alrededor de 2 millones de casos de muertes súbitas de origen cardíaco asociadas a infartos fulminantes en el mundo, panorama que evidencia la necesidad de analizar las causas de este síndrome y de qué manera es posible prevenirlo.
Para el Dr. Javier Bonilla, magister en Fisiología, especialista en medicina del deporte y docente de la Fundación Universitaria San Martín, algunas de las principales causas que dan origen a este síndrome son arterias coronarias que se tapan por placas de grasa o el crecimiento anormal corazón, patología que se conoce como cardiomiopatía hipertrófica.
“La posibilidad que una persona muera producto de una muerte súbita puede variar de acuerdo a la población, se estima que en mayores de 35 años es por causas coronarias y en el caso de menores de 35 años, se debe a una falla congénita, es decir, que desde el nacimiento se originó esta deficiencia. De igual forma, personas con enfermedades cardiometabólicas como la obesidad y la diabetes, pueden ser más propensas a sufrir este tipo de síndrome”, explicó el médico.
Pero ¿qué cuidados debe tener una persona para reducir el riesgo de morir súbitamente?
Según el Dr. Bonilla, la mejor forma de prevenir este tipo de sucesos es que toda persona que practique ejercicio, entrenamiento o deporte realice una evaluación pre-participativa guiada por un médico del deporte, el cual le brinde las recomendaciones necesarias de acuerdo a sus condiciones de salud y permita establecer si existe algún tipo de alteración cardiovascular, pulmonar, neurológica o de origen osteomuscular.
Importante que dentro de la asistencia y control médico anual se realice periódicamente un electrocardiograma de base, el cual permita evaluar el riesgo de problemas eléctricos en el corazón que pueden conllevar a una muerte súbita.
Así mismo, si una persona que dentro de sus actividades regulares tiene una carga cardiovascular alta como un deportista, es necesario que un especialista le brinde el aval médico que cuenta con las condiciones de salud óptimas para competir.
Finalmente, llevar un estilo de vida saludable con una alimentación controlada en grasas y azúcares ayudará a mantener las arterias libres y reducir el riesgo cardiovascular.