El fenómeno de La Niña: lo que debes saber sobre sus impactos en el clima
Para que se declare oficialmente el fenómeno de La Niña, las alteraciones oceánicas y atmosféricas deben persistir durante al menos cinco meses.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) ha alertado sobre la presencia del fenómeno de La Niña, una fase climática extrema que forma parte del ciclo El Niño-Oscilación del Sur (ENOS).
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Este fenómeno se caracteriza por el enfriamiento a gran escala de las aguas superficiales en el centro y oriente del océano Pacífico, lo que altera la atmósfera y provoca, entre otros efectos, un aumento de los vientos alisios y mayor nubosidad en áreas cercanas a los 180° W.
Para que se declare oficialmente el fenómeno de La Niña, las alteraciones oceánicas y atmosféricas deben persistir durante al menos cinco meses.
Entre sus consecuencias más notables está el aumento significativo de lluvias en las regiones Caribe, Andina y Pacífica de Colombia, lo que puede generar condiciones extremas en el clima de estas zonas.
A nivel global, La Niña tiene repercusiones en el comportamiento climático, afectando patrones de precipitaciones y temperaturas en diferentes partes del mundo.
Este fenómeno suele traer consigo temporadas más húmedas, lo que puede influir en sectores como la agricultura y la gestión de recursos hídricos. Además de aumentar el riesgo de desastres naturales como inundaciones y deslizamientos en las regiones afectadas.