Colombia entrega oficialmente Zona Azul a la ONU para la COP16

A solo siete días del inicio de la COP16, este lunes se realizó la entrega oficial de la Zona Azul por parte de Colombia a las Naciones Unidas (ONU).

Este espacio, ubicado en el Centro de Eventos Valle del Pacífico, será el escenario donde se tomarán decisiones trascendentales sobre la implementación del Marco Global de Biodiversidad Kunming Montreal.

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La ceremonia donde fue izada la bandera de la ONU fue liderada por la ministra de Ambiente, Susana Muhamad y Astrid Schomaker, secretaria ejecutiva del Convenio sobre Diversidad Biológica, en compañía de autoridades locales como el alcalde de Cali, Alejandro Eder, y la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro.

“La bandera azul de Naciones Unidas implica que Colombia se convierte en el anfitrión del mundo para esta gran discusión, para esta búsqueda de fondo, de salvaguardar todas las formas de vida, no solo la vida humana, porque entendiendo que si salvaguardamos todas las formas de vida, nos estamos salvaguardando a nosotros, erigimos el principio de Paz con la Naturaleza, pero que también significa la búsqueda de la paz entre los pueblos”, explicó la ministra.

A partir del 21 de octubre, el Centro de Eventos acogerá a más de 18.000 personas acreditadas, incluyendo delegaciones de 196 países.

“Hoy es un día histórico para nuestra ‘Sucursal del Cielo’ porque hoy damos inicio a la COP16. Cali es una de las ciudades más biodiversas del mundo y hoy estamos en un momento global urgente de cuidado al medio ambiente, y que esa discusión se pueda llevar a cabo en nuestra ciudad es un gran honor y una grandísima responsabilidad”, indicó el alcalde Eder.

La Zona Azul, es un espacio de más de 77.000 metros cuadrados, acondicionado con más de 27 pabellones, 14 salas de negociación, 41 carpas para conferencias y dos salones principales para plenarias. Su acondicionamiento requirió una inversión de 1.500 millones de pesos.

Este espacio ahora bajo la administración de las Naciones Unidas, estará resguardada por un robusto operativo de seguridad, coordinado por la ONU y apoyado por la Policía Nacional y el Ejército de Colombia, para garantizar un entorno seguro durante las negociaciones, que culminarán el 1 de noviembre.